SALVE
vida y dulzura y esperanza nuestra:
Dios te salve. A ti llamamos los desterrados
a ti suspiramos, gimiendo y llorando en este valle de lágrimas.
Ea, pues, Señora abogada nuestra,
vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos
y, después de este destierro, muéstranos a Jesús,
fruto bendito de tu vientre.
¡Oh clementísima! ¡oh piadosa! ¡oh dulce Virgen María!
R. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas
de nuestro Señor Jesucristo.
Amén.
DÍA 5 de nuestra novena, nueve días orando con el Santo Rosario para que SEA REVELADA LA CURA DEL CÁNCER A TODA LA HUMANIDAD.
Decimos después de cada casa del Rosario MARÍA REINA DE LA PAZ, RUEGA POR NOSOTROS Y PARA QUE SEA REVELADA LA CURA DEL CÁNCER. Y durante el día, cuantas veces nos recordemos.
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